Esta publicación consta de tres partes que iremos desgranando día a día, e iremos mostrando fotos y los comentarios de las mismas, en ellas podréis ver el gran parecido que tiene Nuestro Señor de la Misericordia con buena parte de su obra y gloria. Tras esta publicación intentaremos hacer lo mismo pero en esa ocasión lo aremos con las imágenes Marianas que salieron de su gubia.
Francisco Buiza, la gubia de la pasión.
Con esta entrada pretendemos acercar un poco mas si cabe la figura del insigne imaginero carmonense D. Francisco Buiza Fernández, autor entre otros de nuestro titular, el Santísimo Cristo de
Su padre cabrero de profesión y su madre lavandera y costurera en la casa del Barón de García Real. El matrimonio tuvo sietes hijos siendo Francisco el segundo de ellos. Creció en el seno de una familia cristiana y muy humilde.
Él ya de muy pequeño sabía cual era su verdadera vocación ya que con solo ocho añitos en el colegio de los Salesianos de Carmona, donde cursaba sus estudios, ya comenzaba a hacer figuritas de nacimiento que no llegaba a cocer, por lo que cada año se estropeaban y de nuevo volvía a realizar cuando se acercaban las fiestas navideñas, vendiéndoselas a los propios compañeros de clase o intercambiándolas por cualquier cosa.
En el colegio permaneció hasta los trece años donde estimulaba su interés por las artes plásticas. Buiza siempre recordaba a su maestro que potenciaba su actividad artística aunque a veces cuando explicaba otras materias lo castigaba “por hacer muñecos de barro bajo la mesa”.
En 1935, ya se avecinaba la guerra civil española, las penurias económicas lo fuerzan a ejercer como agricultor, pastor, panadero…
Durante este tiempo también participaba en certámenes y concursos de escultura que se celebraban en su ciudad natal donde siempre obtuvo premios y menciones.
Sus padres no se llevaban bien por esta época y trataron de separarse con lo que su madre decide ir con sus hijos a Sevilla para trabajar. Este desplazamiento a la capital fue para Buiza un paso importante en la consolidación de su vocación artística.
Desde 1939 hasta 1945 estuvo trabajando como tallista de la madera en el taller de Francisco Vélez Bracho y por las tardes complementaba su formación cursando dibujo modelado en la escuela de Artes y Oficios e iba introduciéndose en el mundillo artístico de la ciudad visitando los talleres de Castillo Lastrucci, Sánchez Cid…etc.
En 1945 marcha a trabajar con Pedro Navia y Campos, escultor y ceramista, donde ejerció de modelista. La permanencia en esta fabrica tuvo un gran interés para el artista ya que pudo ver muchos modelos y conocer promesas como, por ejemplo, a Luis Ortega Bru compañero de trabajo. Y donde conoció al que fue su gran maestro el escultor-imaginero, Sebastián Santos Rojas. Al maestro le llamo la atención el trabajo del joven Buiza y le pidió que le hiciese unos vaciados de un nacimiento y luego le sacó de punto la cabeza de una dolorosa. Así empezó la relación con Sebastián santos, relación que si afianzará hasta llegar a ser su discípulo desde 1946 hasta 1952.
Terminando su formación siempre al lado de su maestro Buiza hace una talla completamente de su mano, la “Virgen de la caridad” (1948) para Málaga.
Durante este tiempo también participaba en certámenes y concursos de escultura que se celebraban en su ciudad natal donde siempre obtuvo premios y menciones.
Sus padres no se llevaban bien por esta época y trataron de separarse con lo que su madre decide ir con sus hijos a Sevilla para trabajar. Este desplazamiento a la capital fue para Buiza un paso importante en la consolidación de su vocación artística.
Desde 1939 hasta 1945 estuvo trabajando como tallista de la madera en el taller de Francisco Vélez Bracho y por las tardes complementaba su formación cursando dibujo modelado en la escuela de Artes y Oficios e iba introduciéndose en el mundillo artístico de la ciudad visitando los talleres de Castillo Lastrucci, Sánchez Cid…etc.
En 1945 marcha a trabajar con Pedro Navia y Campos, escultor y ceramista, donde ejerció de modelista. La permanencia en esta fabrica tuvo un gran interés para el artista ya que pudo ver muchos modelos y conocer promesas como, por ejemplo, a Luis Ortega Bru compañero de trabajo. Y donde conoció al que fue su gran maestro el escultor-imaginero, Sebastián Santos Rojas. Al maestro le llamo la atención el trabajo del joven Buiza y le pidió que le hiciese unos vaciados de un nacimiento y luego le sacó de punto la cabeza de una dolorosa. Así empezó la relación con Sebastián santos, relación que si afianzará hasta llegar a ser su discípulo desde 1946 hasta 1952.
Terminando su formación siempre al lado de su maestro Buiza hace una talla completamente de su mano, la “Virgen de la caridad” (1948) para Málaga.
El día 15 de Octubre de 1953 contrajo matrimonio con Dolores Hidalgo Patiño.
La falta de entendimiento con los doradores hacen que Buiza busque un estudio propio donde instalarse y poder concentrarse en sus trabajos y fue su maestro Sebastián Santos quien le buscase un estudio en la popular y castiza Casa de los Artistas.
El primer trabajo que realizó Buiza fue uno encomendado por su maestro, sacar de puntos la “Santa Marta” (Patrona de los hosteleros que radica en la iglesia parroquial de San Andrés, Sevilla), concretamente la cabeza y las manos.
En esta época todas sus obras tienden a satisfacer la demanda, el gusto del público.
En 1963 sufre un accidente de moto que le lleva a tener que estar todo un año hospitalizado. Todo este tiempo en el hospital le sirvió para hacer un gran boceto para el “Cristo de
A partir de ahí su prestigio artístico asciende, los encargos no cesan y hace su aparición el éxito.
Al no tener hijo, su madre comentaba algunas veces con la sonrisa en los labios que el “Cristo de
Buiza no fue profeta en su tierra. A pesar se dejar testimonio de su gran producción en Sevilla, son Cádiz y Málaga las que conservan lo mas granado de su obra. Buen ejemplo de ello puede ser el hecho de que las cuatro Dolorosas que procesionan el Viernes Santo de Madrugada en Cádiz son de él.
Sin lugar a dudas debemos destacar la labor de magisterio que Buiza ejerció en su taller. Puede considerarse maestro de una generación de escultores-imagineros como Luis Álvarez Duarte, Augusto Morilla, Juan Ventura, Francisco Berlanga, Matilde García, Juan Miñarro, etc. Siempre daba el mismo consejo a sus discípulos “A fuerza de mucho trabajo se hace uno maestro”
Dos fueron las Hermandades Sevillanas a las que perteneció a lo largo de su vida: la de San Benito por razones evidentes y la de
El que a la larga seria el último año de su vida 1982, fue un año intensa de trabajo para él y fue el momento en que comenzaron a aparecer los síntomas de su dolencia. Ayudado por sus más íntimos colaboradores Francisco Berlanga, Manuel Lobato y Matilde García realiza varias obras destacadas como “Stmo. Cristo de
El 1 de Marzo del mismo año a las 9 de la mañana fallecía Buiza de la larga y dolorosa enfermedad cancerosa.
El entierro se celebro a la mañana siguiente en la parroquia de San Lorenzo de Sevilla y luego se trasladó y se dio sepultura a su cuerpo yacente en el sevillano cementerio de San Fernando.
Son muchas las tallas que Buiza realizó durante su dilatada carrera como imaginero, entre las que destacan gran cantidad de dolorosas (de las que ya nos ocuparemos en otra ocasión), restauraciones e imágenes secundarias y de pequeño tamaño para composiciones de pasos procesionales. Pero hoy nos queremos ocupar principalmente de su particular visión de lo que fue la pasión, muerte y resurrección de nuestro señor Jesucristo mediante una serie de imágenes titulares de hermandades y cofradías de toda la geografía nacional que tienen la suerte de tener como titular cristífero una talla del insigne imaginero de Carmona. Es por ello que os relatamos mediante imágenes "
2 comentarios:
Lo mínimo es citar de donde habéis cogido las fotos.
Falta de respeto.
Amigo anónimo, las fotos son tomadas de Internet, y para tu aclaración esta publicación en concreto esta realizada por un hermano que merece todos los respetos de nuestro Blog.
Me parece que la única persona que esta faltando el respeto es usted escudándose en el anonimato.
Como aclaración a las personas que suelen visitar nuestro blog, decirles que aunque nunca se han publicado comentarios anónimos, en esta ocasión lo hemos hecho para que todos vean, que este blog no tiene nada que esconder.
Un abrazo amigo anónimo.
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